Introducción: hablamos del Fintech y Insurtech, pero del que está asegurado o posible candidato, no hay comentarios. Cuál es su perfil económico – social, nivel de educación, etc. En este sentido, cada país existe sus perfiles. En el caso Venezuela no es lo mismo los estados andinos que los orientales son perfiles y artesanías diferentes, etc. luego, las necesidades protección pueden ser iguales, parecidas o diferentes.

Como la tecnología permite la mineralización de datos, es posible identificar la ubicación de un evento o grupo de eventos con sus características en un mapa de riesgo, lo cual hace viable el manejo estadístico de los riesgos. Esta posibilidad futura nos hace descartar la estandarización de las coberturas, dado que con el citado mapa es factible elaborar coberturas o productos específicos dirigidos a masas específicas de la población. Indudablemente, es un camino por construir que cambiará las perspectivas de la actividad. Hasta donde llegar lo dirá la tecnología y la capacidad técnica de la actividad.

*Contratación del Seguro: todas las personas tenemos unos derechos que debemos apreciar, honrar y uno deberes que debemos cumplir, juntos hacen la convivencia social.  Cada derecho trae consigo deberes y responsabilidades. Si tenemos derecho a ser respetados, tenemos el deber de respetar.

El Contrato de Seguro, es un convenio o documento escrito entre las partes que se obligan en su contenido y a cuyo no cumplimiento puede ser requerido. Es consensual, bilateral, oneroso, aleatorio, de buena fe y de ejecución sucesiva.

Como en toda actividad quien tiene deberes, tiene derechos. Igual sucede con los seguros, quien va a contratar un seguro está obligado a ciertos requisitos indispensables para que la contratación cumpla con las condiciones necesarias y suficientes para garantizarse una protección sin objeciones al ocurrir un evento o, en otros términos, una buena compra.

Al cumplir con sus deberes, tiene la facultad de hacer o exigir todo aquello que la ley o la norma establece a su favor al momento de la aplicación del Contrato de Seguro, no solo como consecuencia de un evento, sino también en los servicios inherentes al hecho.

Antes de la contratación existen requisitos que es un deber para quien quiere contratar, estos expresan las condiciones que exige la aseguradora, es su derecho. Y también tiene sus deberes en período de la duración del contrato y al momento de la ocurrencia del evento con sus trámites posteriores. Cumplidos sus deberes, el asegurado espera, por el principio de la buena fe, el cumplimiento de sus derechos cuando son exigidos.

*El asegurado: no es un asegurador no es experto y quizás no sabe de seguros. No conoce el lenguaje especial de la actividad, definiciones y términos, pero se le exige tales deberes. Por ejemplo:” … Informarse responsablemente y leer los documentos que se le presenten para contratar un seguro, de manera tal de comprender el contenido y las características de los servicios ofrecidos…”. Aclaramos existen contratos de fácil comprensión, pero de igual forma existen contratos que por su argot es difícil su entendimiento o puede darse una interpretación forzada o errónea, en especial en las limitaciones del riesgo. No es lo mismo contratar un seguro funerario o accidentes que un seguro de vida, de retiro, etc. Igual sucede con los seguros generales.

Disyuntiva que coloca al asegurado en una desventaja contractual, cuando se comercializa el seguro como una mercancía, objeto de trato o venta con el fin de aumentar la demanda. “…acceder a información veraz, oportuna, clara y completa sobre las condiciones que rigen el seguro que está contratando. La información debe comprender los antecedentes necesarios que le permitan conocer y apreciar los aspectos y características básicas del servicio ofrecido.”. “…con la finalidad de comprender el contenido y las características de lo ofrecido…” “…tener presente que existen exclusiones definitivas, exclusiones temporales y plazos de espera…”. Esto dicen algunas webs como una manera de orientación positiva.

Con el uso de la IA puede crearse asistentes virtuales específicos, para apoyar al usuario en el conocimiento de la realidad aseguradora adaptada a sus necesidades de protección y servicios.

Por otra parte, existen riesgos que no encajan dentro del concepto de mineralización de datos, lo cual implica la necesidad de identificar, analizar e implementar la mejor forma de atención y suscripción, siempre en función del atendido. En todo caso dependerá de los objetivos empresariales de quienes lo implementen. Es el marketing, desarrollar productos o servicios, con su estrategia de comercialización.

Finamente, todo dependerá de la capacidad del usuario en la correcta utilización de los instrumentos digitales a su disposición. Y este es el tema como variable exógena a la actividad aseguradora.

 *El Tema de lo Informático: no solo implica la interpretación en solitario de la información para una persona con poco o ningún conocimiento de la actividad, sino también el manejo de las herramientas creadas para tal fin.  Ambas situaciones, interpretación y manejo, pueden originar problemas que tienen como consecuencia el desánimo al uso.

Esta situación se presenta en las personas que no están acostumbradas a utilizar este tipo de tecnología, ya que su manejo lo limita a las redes sociales. No negamos que la tecnología presenta un gran avance en el control de los riesgos, reducción de Gastos Operativos, eficiencia en los procesos de atención al asegurado y, lo más importante, el seguro hecho como un traje a la medida. Todo dentro de un proceso donde el dialogo se realiza con lo tecnológico en el cualquier momento de la contratación: en la compra, en la vigencia o al ocurrir el evento. Nos preguntamos están las personas en capacidad de utilizar con eficiencia y eficacia estas herramientas cuando deciden su utilización.

Estamos ante un impacto tecnológico en la actividad que refleja al usuario, entonces, es necesario acercar los contenidos tecnológicos con el objetivo de reducir la brecha digital para el buen uso con un resultado satisfactorio para las partes. La subutilización es un problema de costo al no tener el rendimiento esperado.

Limitaciones del Usuario: visto así, decimos que no basta la tecnología, las limitaciones de uso condicionan el bien hacer que van a depender de al menos tres características: la edad, la educación y la destreza tecnológica, o sus combinaciones. Todo producto debe tenerlas en cuenta, a fin de garantizar una operatividad accesible y comprensible al usuario.

Mayor atención es el tema educativo cuando se quiere la expansión geográfica para llegar a los que menos tienen. Nuestro perfil educativo ha ido a menos cuando va perdiendo sus condiciones o propiedades que constituían su fortaleza, situación que nos ha llevado al aumento de la desigualdad social que tiene sus repercusiones en el nivel socio económico, ambientales, salud, etc. que incluye, también, la educación.

Esto nos ocurre cuando en febrero 2024, CEPAL dice: “…se evidencia la importancia del acceso a la conectividad y dispositivos digitales para continuar con los procesos educativos, así como la vida laboral, vida social, además de muchas oportunidades de participación e inclusión que se han visto interrumpidas…” Situación que incluye a la actividad aseguradora.

Entonces, llegamos a una realidad toda expansión tecnológica va acompañada de una evolución social. Luego, la tecnológica al alcance de todos la limita la misma sociedad, ambas deben crecer en conjunto, a la par.

Vamos a cumplir y defender nuestros deberes para exigir nuestros derechos.

Por: Jose Vicente Angarita

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