Introducción: las Jubilaciones no son noticias, si no es por que se alza la voz. Ni aquí, ni allá
se habla del tema, pero cuántos son. Por allí se habla que sumados todos ponen o quitan
gobiernos, luego debería ser un tema importante en una votación.

Existen dos sistemas de pensiones, capitalización que depende de la demografía mundial,
mientras que el de reparto de la demografía nacional. Ambos sistemas supeditados a dos
factores demográficos: la vejez y la tasa de fecundidad.

Los especialistas nos aclaran que la vejez tiene solución, pero con implicaciones políticas…
El tema es la disminución de la tasa de fecundidad. Esta disminución hace que la pirámide
poblacional se esté achantando en el correr del tiempo, es decir, los jubilados aumentan más
rápido que los nacimientos, lo cual crea el desequilibrio del reparto, esto está ocurriendo a
nivel mundial. Por otra parte, en los países con problemas económicos y sociales está
situación se agrava.

Caso Venezuela: en nuestro país dejó de existir el sistema de reparto, su base financiera
en el principio solidario de unos que apoyan a otros. Los unos son los Cotizantes y otros son
los Jubilados, pero los unos llegarán a ser otros en su tiempo de jubilación, lo cual convierte
al sistema en un sinfín que no puede trabarse.

Es la teoría, la realidad es otra. La jubilación hoy es un presupuesto público, la pensión no
sale del salario de unos, sino del erario nacional. Y aquí se complica la situación porque el
reparto es hasta cuanto y cuando alcance……

  • ¿Y qué pasó? Lo resumimos así: prima la ideología política, no el Ciudadano. La política
    social, no es social es ideológica. Entonces, es según el cristal con que se mire. He mantenido
    a lo largo de mis escritos que lo ideológico “desbarata” lo bueno y profundiza lo malo.
    Necesitamos una política que contribuya con el Ser Humano para Ser Un Humano, es decir,
    crear mentes sociales donde los unos apoyen a los otros. No basta la formación académica,
    es necesario su contenido social.
  • ¿Y dónde estamos? Siempre se habla de reconstruir y construir el país, pero mientras
    estamos en esto qué hacemos con las jubilaciones en el ahora y en el después. Él ahora es
    la necesidad inmediata y el después es empezar de cero en la medida que avance lo social
    hacia el logro de su estabilidad y crecimiento. Y nos preguntamos, cómo ir obteniendo los
    recursos monetarios en ese largo período. Pero el tema no es solo lo monetario, también es
    que los unos, el Cotizante, está disminuyendo y los otros, los Jubilados, aumentan. Veamos
    el Censo 2011.
  • Censo 2011: veamos algunas cifras censales para analizar el tema del Cotizante y el
    Jubilado. Solo los dos últimos censos:

El siguiente cuadro representa la población entre el grupo de edades extremas:

En el año 2001 los menores de 19 años agrupaban el 43,10% de la población y en el 2011
disminuyó en un 14,79% para colocarse en un 36,72% de la población censada. En el año
2001 el grupo de 60 y más conformaban el 6,75% de la población y en el 2012 se incrementó
en un 34,36% al colocarse en el 9,07% de la población.

  • Los migrados: si por otra parte le agregamos el éxodo de los venezolanos que han migrado,
    cuyas edades están en el período de cotizar hasta su jubilación. Cuya población, según
    ACNUR al 1er. Trimestre 2023 es 7,13 millones de venezolanos refugiados y migrantes en el
    mundo.
    Suponemos que en su mayoría son personas edad de trabajo entre 20 y 60 años que inferimos
    según el cuadro anterior que están en el orden de al menos el 54,21% del total migrado, 3,87
    millones, con capacidad de trabajar y producir recursos y generar nuevos empleos por
    expansión productiva. Esta situación nos lleva a una clase media desmejorada, desmantelada
    que debe reconstruirse con formación y trabajo digno hasta que vuelva ser el motor pujante
    de la economía, decimos sin clase media no se va al paraíso.
  • La Vejez como problema: existen opiniones que expresan sus pesares sobre la vejez, lo
    más grave es que vienen de cualquier lado ideológico. Estos “sabedores” ven el resultado,
    estado actual, pero sin analizar las causas o no quieren verlas. Y este es el tema.
    Porqué un trabajador que estuvo cotizando durante 30 años, hoy no tiene una pensión digna.
    La respuesta es muy simple: por la inflación y no se tomaron previsiones financieras
    pertinentes. La inflación demuestra una economía mal manejada y más grave cuando existe
    una hiperinflación por muchos años. El deterioro del salario desaparece la cotización, el fondo
    de pensiones del jubilado deja de existir y convierte la pensión en un gasto público. Se pierde
    30 años de ahorro.
    Se toca el punto de la edad, esperanza de vida, se vive mucho, (¿?), acaso vivir más no es
    muestra de bienestar social y nos preguntamos para qué son los censos, los análisis
    estadísticos poblacionales y sus proyecciones publicadas, no son para evaluar el pasado para
    trabajar el futuro. En consecuencia, el deterioro continuo del sustento, lo lleva al deterioro de
    la salud y así le paga la sociedad con sus 30 años o más trabajo y sus aportes al progreso.
  • Los Nacimientos: existe una crisis a nivel mundial sobre la relación entre los nacimientos
    como futuros cotizantes y los jubilados. Es el envejecimiento poblacional. En Venezuela,
    según las estadísticas del INE – proyección realizada en el 2013 – nuestra esperanza de vida
    va en aumento lento, pero sostenido. Por ejemplo, al comparar la esperanza de vida del censo
    2011 con lo calculado para el 2021, se tiene un crecimiento del 1,81%, al pasar de 74,66 años
    en el 2011 a 76,01 años en el 2021. Lo cual nos permite catalogar como un crecimiento muy
    moderado.
    Ahora bien, el Índice de Fecundidad para el 2011 estaba en 2,45 hijos – número medio de
    hijos por mujer – y según estimaciones para el 2021 ronda 2,21 hijos por mujer, lo cual hace
    una disminución del 10,86%. Situación que es posible debido a la migración y a la situación
    económica. Las crisis económico – sociales obligan a las parejas a trabajar y/o abstenerse a
    tener hijos.
    Nuestra tasa de fecundidad está disminuyendo, pero el límite mínimo es del 2,1 hijo por mujer
    para lograr un mínimo de equilibrio en el reparto. Aclaramos que aún no sabemos el impacto
    que tendrá el éxodo venezolano en los cambios demográficos en la estructura poblacional. Lo
    que sí es cierto es que se sentirá más en las edades menores de 60 años. Situación que nos
    puede colocar por debajo del umbral del 2,1, en menor tiempo.
  • Otras Tareas Pendientes: la Economía Informal, las Amas de Casa y los Trabajadores
    Autónomos.
    Lo Informal: las últimas cifras conocidas hablan de más del 35% de la economía informal
    conformado, generalmente, por vendedores ambulantes de cualquier tipo de mercancía. Es
    una población flotante, sin ningún tipo de beneficio social. Tal situación se deriva de los
    desempleados que no consiguen trabajo en períodos prolongados.
    Las Amas de Casa: incorporadas a las pensiones por ley, no por cotizaciones. Lo cual se
    convierte en un gasto público.
    Los Trabajadores Autónomos: que por cuenta propia se dedican a una actividad artesanal,
    profesional o de otra índole, pero que no cotizan a la seguridad social, dado que es una opción
    facultativa.
    Estas tares pendientes deben dársele organicidad dentro de un reorganización de la
    Seguridad Social, no solo en las jubilaciones.
    Hemos realizado un escrito muy comprimido de la situación Venezuela, es indudable que el
    tema necesita más profundidad.
    Conclusión: es indudable que las jubilaciones como prestaciones dinerarias continuas e
    indefinidas por el círculo virtuoso que representan necesitan variables externas estables como
    el control de la inflación, crecimiento económico – social sostenido capaz de mantener la
    armonía de las variables intrínsecas al sistema de reparto.
  • La armonía entre la tasa de fecundidad y la esperanza de vida es un tema de álgida solución
    porque implica cómo incorporar el número de hijos, la esperanza de vida y los beneficios
    dinerarios en los cálculos actuariales.
  • Por otra parte, el estado no puede dejar el fondo de pensiones a la sola aplicación de su
    normativa, sino que debe actuar como ente responsable de cada Jubilado para garantizarle
    su estabilidad económico – social. En términos asegurador, hacer el rol de Reasegurador del
    fondo ante sus desviaciones negativas de cualquier índole. Digamos que se trata de un
    respaldo estabilizador que se construye a lo largo del tiempo.
  • Otro tema de vital importancia es el rol social de las empresas privadas y públicas que
    generan recursos, no solo en el tema de las jubilaciones, sino también en todos los
    componentes de la Seguridad Social. Cuando hablamos de recursos incluimos no solo lo
    dinerario, sino también los servicios que apoyan al bienestar. Tocaremos el tema.

Caracas, 27/07/2023.
Mis Saludos. José Vicente Torres Angarita

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