De la entrevista con Orlando Castro Llanes, en septiembre del año 2012, me quedó el eterno recuerdo de su impronta intelectual y se me sembró el prurito de conocer a profundidad al Hombre, al ser humano.

Es así, que en mi bibliografía intitulada «Personajes y Anécdotas de Mis Recuerdos», comencé a trazar sus rasgos biográficos, todos productos de sus comentarios, de los detalles esbozados por sus amigos y allegados y por una pequeña autobiografía que, él pincelara.

Orlando Castro Llanes nació en San Rafael, entre las esquinas Espada y San Francisco, en el Barrio Cayo Hueso, cerca de la Universidad de la Habana, Cuba, un día 30 de octubre de 1925. Su nacencia sería como cualquier otra, pero como él mismo confesó no le quedaron recuerdos, pues a los dos años de edad, sus padres se mudaron al Barrio El Cerro, donde vivió todo el tiempo que vivió en Cuba.            

En sus nostálgicas añoranzas y evocaciones, poco recordó a su madre, pues ella falleció de tifus a los veintisiete años de edad, dejando al infante al cuidado de su padre y de sus abuelos, a quienes «disfrutó grandemente», según lo admitiera posteriormente.

En sus conversaciones, siempre deploro que sus tíos maternos le quitarán sus tres mascotas: Careta, Cariño y Amor, con quién departía su infancia. Estando viva su madre, fue escolarizado en un colegio de monjas, dónde el único varón era él.

Bajo esa escolaridad, rebelde anímicamente, fue cambiado a un colegio Salesiano, asunto que no le gustó, optando por cambiar de locación escolar a Borroto, que era un colegio ubicado en el Barrio El Cerro. Desde ahí, concluyó la primaria y según él, fue una etapa feliz de su infancia.

Para entonces, Cuba vivía una confrontación política perenne y en ese ambiente, se forjaría el futuro líder juvenil que, llegó a ser. Orlando Castro Llanes podía ser forjado para la lucha, pero en su futuro, estaría el emprendimiento y el empresariado, cómo muchas veces llegó a decir.

Continuará…………….. Prof. Pastor Ascanio Heres

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *