De: Adelis Villarreal, 16/04/2022.
Mayormente la mortalidad del covid-19 o SARS-COV-2, se mide por su capacidad de infectar los pulmones, por ello, con la variante Ómicrom la enfermedad, pareciera perder tasa de mortalidad pues su mayor contagio se da a nivel de las fosas nasales y la garganta, generando solo malestares como un resfriado o tos.
La inmunidad, exceptuando la innata, adaptativa o activa se puede adquirir: infectado por el virus o a través de la vacuna. Una persona que se haya contagiado del virus y luego se vacuna, obtiene mayor inmunidad. También gozarán de mayor inmunidad las persona, que aún habiéndose vacunado, se infectan con el virus; además de padecer unos sintomas más leve o padecer una enfermedad menos graves, de lo que le hubiese dado sin estar vacunado.
Dado a la complejidad del SARS-COV-2, pues al ser un virus vascular puede viajar por el torrente sanguíneo y atacar diferentes órganos del cuerpo, los científicos PREFIEREN que aparezca una variante más contagiosa y menos letal para entrar en la etapa ENDEMICA(*), pues ello aceleraría la INMUNIDAD COLECTIVA y para lo cual, la vacunación seguiría siendo una gran herramienta. Con el surgimiento de la variante Ómicrom, LA PREFERENCIA de los científicos pareciera hacerse realidad.
(*): «La endemia lo que significa es que debe haber pocos casos en general con algunos picos a través del tiempo. Pero picos pequeños, nada que saque completamente del escenario la situación; un ejemplo, es cuando ha veces aparece un brote de sarampión, pero como ya hay inmunidad en la población se detiene el brote, eso es endemia». Dr Malaquías López, Epidemiólogo mexicano.
En líneas generales la endemia se refiere que ante la aparición de un virus, que de hecho aparece cada cierto tiempo, sigamos todos en las mismas condiciones, donde no habrían muchos o miles de caso y sólo se generan pequeños brotes dado a que hay suficiente inmunidad en la población para contener el avance del virus.
Pero mientras esa inmunidad colectiva no se logre, precisamente la continúa aparición de variantes o sub.variantes podría llevar, en algún momento, a que el virus cambiara tanto que ya no lo reconozca nuestra inmunidad y se podría nuevamente empezar desde cero, como en marzo del 2021.
Recientemente se han asignado nuevas identificaciones para el virus SARS-COV-2 como XA, XB, XC, XD, XE y XF, es decir, ya no llevan nombre de letra griega (alfa, beta, gamma, delta, etc) y son consideradas como subvariante. Esto se debe a su capacidad de mutar.
Según el Dr Elmer Huerta, médico peruano especializado en oncología y salud pública, las variantes con nombres de letra griega como alfa, beta, gamma, delta, Ómicrom, etcétera, es una línea de evolución del virus, en la que UN VIRUS cuando infecta una persona; dentro de la persona, el virus cambia, muta y sale un nuevo virus, diferente, una variante; es decir, un sólo virus dentro de una persona, cambió. Las que son conocidas como subvariantes y llevan la letra X, tienen un mecanismo diferente. En este caso una persona se infecta con dos variantes al mismo tiempo, al ser infectado por dos variantes, por ejemplo, la delta y la ómicrom, o la B.A.1 y la B.A.2 (ambas variante ómicrom que dieron origen a la sub.variante XE, presente en Reino Unido, China e India), al mismo tiempo, una vez dentro de las células de la persona, estos virus o variantes (que genéticamente son hermanos) en algún momento se encuentran y cambian un poco de material genético (en virología se llama recombinación) y sale un nuevo virus, recombinado. Eso es lo que XA, XB, XD (una mezcla de ómicrom con Delta), XE y XF significan, recombinaciones de virus o virus recombinado.
Acota el Dr Huerta que muy probablemente, estás recombinaciones se dieron antes con las otras variantes, lo que pasa es que las técnicas genomicas están mejorando y ahora es mucho más fácil descubrirlas. Referente a lo peligroso de estás subvariantes, el Dr Elme Huerta, señala que en este momento no se sabe de la implicancia. Si causan una enfermedad más severa o no, la OMS ha dicho que deben estar en plena vigilancia, porque así fue como comenzó ómicrom, delta, etcétera; pero, por ahora no se sabe mucho de la implicancia clinica de estás variantes. También cree que el método de barbijo o barrera, como el uso del condón, vino para quedarse; en tanto el uso de mascarilla en lugares públicos y encerrados será algo que la gente asumirá y coloca como ejemplo, la reacción cuando una persona tose en un bus.
La sensación de relajo, porque han bajado los casos de enfermos graves en los centros de salud e igual la cifra de fallecidos, puede ser contraproducente más para las personas vulnerables. Hay que tener presente que sin una buena inmunidad (vulnerabilidad), cualquiera de las variantes lo podría contagiar y se podría pasar muy mal. Son las personas mayores y las inmunodeprimidas las más vulnerables.
«Es preferible esperar lo mejor, pero prepararse para lo peor!!» Las indicaciones médicas actuales es que aprendamos a convivir con el virus, a pesar de que se levanten las restricciones es bueno usar las mascarillas. Es producente saber como van las incidencias en nuestra comunidad o área de desenvolvimiento para no andar tan relajados. Mantener el sistema inmunológico fuerte y equilibrado, con alimentación, hábitos y pensamientos antiflamatorios, junto con los antióxidantes, son clave. La Granada y los frutos rojos como las moras, los arándanos, las uvas, son muy buenos. Mantener mascarilla N95; tener un oxímetro, un tensiómetro y un termómetro. También es prioritario tener un auto-test y en caso de síntomas gripales, autoaislarse y a los 5 días hacer la prueba. Ponerse la tercera dosis e incluso en ancianos, hasta la cuarta dosis (en Estados Unidos están recomendando la cuarta dosis para los mayores de 50 años o los que tienen más de 12 años con algún problema crónico que debilite la inmunidad). Y lo de siempre lavarse las manos y el distanciamiento social, igual nos tenemos que bañar, cepillar, arreglar, a diario!!. COLEGAS, no bajemos la guardia!!
Saludos//